CRONOLOGÍA DE NUESTRA EMMA, “nació pequeña, pero con grandeza y fortaleza”

13 de septiembre de 2022

Un nuevo camino Un 12 de abril de 2022 nuestras vidas se detienen bruscamente para tomar un rumbo desconocido, incierto, llenos de luces y sombras, en el Hospital de Los Ángeles, nace mediante una cesárea de urgencia nuestra hija con 30 semanas de gestación con un 1 kilo de peso.

Miedo, Perder a Emma es una posibilidad tangible, la desesperación, el miedo nos vuelve erráticos, un momento difícil, quizás la sombra mas oscura de este nuevo camino.

La separación Posterior a su nacimiento, fue trasladada a Neonatología y yo a la sala de puerperio donde compartí habitación con otra madre y su hija. Cuando recibí la visita de mi pareja, nos vimos enfrentados a nuestra triste realidad; a nuestro lado había una familia feliz mientras nosotros estábamos destrozados por no tener a nuestra pequeña en nuestros brazos.

El encuentro. Felipe, mi pareja fue el primero en ver a Emma. Para mí era aterrador perderla y no quería ver a mi hija llena de mangueras en una incubadora, me costó tomar la decisión de visitarla por primera vez, pero una vez que la vimos, la fortaleza de nuestra pequeña nos llenó de energía para continuar este camino, mirando la vida de manera más resiliente.

La esperanza del canguro. Un hito que no podemos dejar de mencionar, es lo importante y significativo que fue tocarla por primera vez. Y por supuesto, la técnica canguro que nos hizo sentir una profunda conexión con nuestra hija y nos llenó de esperanza y alegría.

Todos crecimos. Dentro de todo lo complejo de los 2 meses en “Neo”, aprendimos a ser pacientes y a no perder nunca la confianza. Lo que instintivamente nos permitía guiar a otros padres que iniciaban el proceso. Esta experiencia nos convirtió en personas más empáticas y conectadas con la dinámica realidad, en definitiva, crecimos y avanzamos junto a Emma.

Dios nos acompaña. Durante este proceso, fue muy importante la contención y el cariño de nuestras familias, amigas y amigos. Y por supuesto, la confianza en el equipo médico, que permitieron que Emma hoy sea una bebé llena de energía. Personas que Dios puso en nuestro camino, para acompañarnos, apoyarnos para salir adelante
Hoy después de nuestros temores, dolores y angustias, estamos construyendo una familia con amor felicidad y dedicación.
Agradecemos la posibilidad de transmitir una parte de nuestra vivencia, para que en conjunto con otros testimonios, se puedan unir voluntades políticas y criterios técnicos para construir mejores políticas públicas en torno a la prematurez en Chile.

Saludos Afectuosos
Felipe, Mónica y Emma.